El alcalde de Badajoz, Francisco Javier Fragoso, se refirió ayer, tras ser preguntado por la prensa, al caso del extrabajador municipal Pedro Luengo, que hoy cumple 18 días en huelga de hambre a las puertas del ayuntamiento para exigir su readmisión. Fragoso mostró su «absoluta solidaridad» hacia él y aseguró que es «el primero» que sufre al ver la difícil situación de este joven, pero aseguró que «no puedo darle lo que quiere porque se ponga en huelga de hambre, si no es legal». En este sentido, el alcalde señaló que se ha engañado a este extrabajador del Parque Móvil generándole «unas expectativas que no hay» y criticó que lo estén «manipulando para sacar rédito político».
El alcalde recordó que Pedro Luengo encadenó cuatro contratos laborales en el ayuntamiento, el último de ellos de relevo para cubrir una jubilación parcial, a través de una bolsa de trabajo. Cuando esa jubilación se hizo definitiva, su contrato se extinguió. Fragoso insistió en que el error del ayuntamiento fue comunicarle su despido con unos días de retraso, por lo que el juez lo declaró improcedente y obligó a indemnizarlo. Asimismo, señaló que, ya en el pleno en el que los grupos acordaron buscar una solución, advirtió que el acuerdo solo podía expresar «la voluntad política», pero no que se pudiera readmitir, puesto que los informes de Intervención posteriores resuelven que «no es legal». H
