Almossassa seguirá potenciando su parte cultural para conseguir la declaración de Fiesta de Interés Turístico Regional, primero, y la Nacional, más adelante. Este año, la celebración ha introducido algunos cambios como que no haya habido barras, que en las casetas instaladas en el mercado árabe no se dispensen bebidas alcohólicas de alta graduación y que los puestos cierren a medianoche. «Se seguirá en esta línea», aseguró ayer la concejala de Cultura, Paloma Morcillo, quien se mostró satisfecha con el resultado de esta edición y con la afluencia de público.

El sábado los técnicos de la Junta de Extremadura visitaron la fiesta para evaluar la solicitud del ayuntamiento pacense para que sea declarada de Interés Turístico Regional. La Concejalía de Cultura preparará un dossier con una memoria y fotografías por si es necesario remitir más información. Morcillo confió en que la resolución se conozca «en pocos meses» y que sea favorable, pues consideró que Almossassa es «merecedora» de este título. El siguiente paso será optar al Interés Turístico Nacional.

La concejala defendió que los cambios introducidos en la fiesta contribuirán a lograr estas aspiraciones, pero también a mantener la «identidad» de Almossassa, porque no se trata de «una fiesta más» y no puede convertirse «en una verbena». En este sentido, destacó que se seguirán incrementando las actividades culturales y didácticas y se ampliarán propuestas como la Feria del Libro Hispanoárabe, que este año se ha desarrollado por primera vez. A su inauguración asistieron los embajadores del Túnez y Qatar, un hecho que la concejala puso en valor porque «da proyección» a la fiesta.

Morcillo se congratuló de que Almossassa se hubiese desarrollado sin incidentes. «Ha sido la edición más tranquila de los últimos años», señaló, al tiempo que destacó que ha habido un considerable aumento del público familiar y de adolescentes propiciado, a su juicio, por el ambiente que se ha creado este año.

Además resaltó la participación en los talleres y actividades dirigidos a los más pequeños, que tienen como fin hacerles partícipes de la fiesta y de la historia de su ciudad, así como la buena acogida de la representación teatral de este año, los conciertos y las veladas poéticas. También, según dijo, están «contentos» los artesanos y los hosteleros.

Sobre la polémica por la recomendación de que en las casetas del mercado no se sirviese carne de cerdo, la concejala, como ya hizo el alcalde, Francisco Javier Fragoso, el día anterior, opinó que se había «salido de madre» y defendió que se solo se trataba de hacer «un guiño» al pasado. «Nunca se ha prohibido y el que ha querido la ha podido comer sin problemas», dijo, mientras aseguró que lo ocurrido no va más allá de la «anécdota».

El sábado por la noche se registró mucha afluencia al mercado y calles del entorno y también hubo bastante público durante el día, a pesar de que era mucha la oferta de ocio que acogió la ciudad, con la exhibición de la Policía Nacional en la plaza de toros y el renferéndum de la Fundación CB en el paseo de San Francisco. «Si las actividades que se organizan en Badajoz son un éxito, es porque la gente siempre se implica y participa», valoró la concejala.

Cultura ya trabaja en la próxima edición de Almossassa.