Decenas de alumnos de Medicina y de Enfermería se vacunaron ayer voluntariamente contra la gripe A, en una iniciativa sanitaria con carácter pedagógico, por la la imagen de ver a los sanitarios vacunándose, que transmita tranquilidad a la población, "y seguridad, pues ha sido aprobada por los organismos internacionales competentes", según señaló el vicedecano de Ordenación Académica de la facultad de Medicina, Agustín Muñoz.

Fue él, ante el temor de de los estudiantes al no saber si se les consideraba grupo de riesgo, quien propuso la medida a las autoridades sanitarias y que, una vez aceptada, se ofertó a los alumnos que realizan prácticas clínicas en contacto con pacientes. En un principio se contó también con Fisioterapia, pero se descartó por no estar en contacto tan estrecho con los enfermos.

También el decano Pedro Bureo se vacunó, y parte de su equipo. Muñoz señaló que hay que tranquilizar a la población y animar a quienes forman parte de los grupos de riesgos a que se vacunen sin temor, como hizo él mismo, dado que no hay riesgos añadidos a los de cualquier otra vacuna. El vicedecano fue muy crítico con los médicos que no se vacunan y que aconsejan no vacunarse, por ejemplo a las embarazadas, cuando éstas disponen de una vacuna especial.

Sobre el temor a posibles reacciones por ser una vacuna nueva, Muñoz Sanz explicó que "las vacunas de gripe normal son nuevas cada año, porque se hacen adaptándose a las características de los virus que se detectan por los 180 centros que se dedican a estudiarlo en el mundo".