El colegio público De Gabriel, de Gévora, va a contar el próximo curso con un nuevo aula para Primaria. La Consejería de Educación ya está ejecutando las obras, que consisten en utilizar parte del porche del centro y un almacén que existe en un lateral, que se ha demolido. La consejería insiste en que se trata de una "obra de urgencia", para dar respuesta "inmediata" a las necesidades de espacio del colegio de cara al próximo curso y que la "solución definitiva a los problemas de espacio" estará contemplada en el Plan de Infraestructuras Educativas, que se empezará a tramitar en septiembre en la Asamblea de Extremadura, con el reinicio del periodo de sesiones y que requiere, para ser aprobado, el apoyo de dos tercios de los diputados del parlamento regional. Pero la asociación de padres no entiende que la Administración educativa se haya dedicado a "parchear", readaptando el colegio, que ya no dispone de más espacio, en lugar de haber abordado una actuación definitiva.

La población de Gévora se ha duplicado en los últimos 10 años, fundamentalmente con familias jóvenes con hijos, y el colegio se ha quedado pequeño. El centro empezó con una sola línea de primero a octavo. Como abrió el instituto, solventó la situación porque a partir de sexto se van. Este curso no quedaban más espacios para reutilizarlos como clases, pues ya se ocupó el aula de informática, la de Música y la biblioteca, que se usaban para desdobles, apoyos, actividades extras y ya no existen porque son todas aulas. El ampa lleva años pidiendo una solución porque además se utilizan las antiguas aulas, separadas por una carretera del edificio principal, con el riesgo que supone para los alumnos.

La Junta optó por la ampliación del actual centro, pero el Ayuntamiento de Badajoz ha propuesto que se haga un colegio nuevo, en unos terrenos junto al instituto, pues para ampliar al actual tiene que ceder una calle del pueblo, habrá que habilitar otra salida y desviar las conducciones. Los padres también quieren estrenar otro edificio "y que no sigan con los parches, porque Gévora tiene una perspectiva de seguir creciendo y al final se van a gastar el mismo dinero que para construir un colegio nuevo".

Alicia Sánchez, presidenta de la ampa, apunta que los padres siguen pendientes de la aprobación del Plan de Infraestructuras de la Junta, porque la obra que se está ejecutando "es simplemente para que los niños puedan iniciar el curso". No quieren ni pensar que la inversión que ahora se está haciendo (más de 47.000 euros) signifique que la solución definitiva va a tardar en llegar. "Después de tantos años, como han ido pasando la pelota de un tejado a otro, ha sido inevitable tener que hacer esta inversión, son ellos los que están haciendo que se incrementen los costes", apunta.

Para el siguiente curso, habría que habilitar otro aula, pero ya no hay más espacio. Los padres están ahora "con los dedos cruzados" a la espera de que se apruebe el Plan de Infraestructuras y, si no sale adelante una solución, "otra vez a la calle", advierten.