Los vecinos de Cañada-Las Moreras y de Jardines del Guadiana han denunciado numerosas veces el peligro de que se mantenga la vieja gravera de la margen derecha del río, junto al puente Real. Hoy es una zona peligrosa, un vertedero incontrolado y hasta en un cementerio de perros muertos, con el consiguiente peligro.