El Ayuntamiento de Badajoz aprobó ayer, en sesión plenaria de carácter extraordinario, los presupuestos municipales para el 2005, que se elevan a 69,5 millones de euros, lo que supone un descenso del 3,45% respecto a los presupuestos anteriores, justificado por el concejal de Hacienda, Nicasio Monterde, en que el próximo año no se pedirán más préstamos. Tanto el PSOE como IU votaron en contra, pero la mayoría absoluta del PP no dio lugar a dudas.

El concejal socialista José Ramón Suárez dijo que son unos presupuestos "faltos de ambición" y los comparó con los de otras ciudades con semejante población, como Tarragona (108 millones), Logroño (132), Castellón (111), Burgos (131), Almería (151), Albacete (133) y Huelva (casi 100). Monterde contestó que para hacer esta comparación se necesitan más parámetros que el número de habitantes, que muchas de estas poblaciones son costeras y que habría que ver la aportación que reciben de la comunidad autónoma.

EMPLEO Suárez coincidió con el concejal de IU, Manuel Sosa, en reprochar al equipo de gobierno que sigan sin convocar oferta pública de empleo. El socialista recordó que desde el 2002 hay 55 bomberos y 160 policías locales.

Sosa, por su parte, insistió en comparar los presupuestos con "el cuento de la lechera" y los calificó como "un mero trámite de elaboración técnica". El concejal reconoció que Monterde ha cumplido los plazos "escrupulosamente" en la presentación de las cuentas pero, entre otras cuestiones, criticó que los ingresos previstos no sean reales, pues no se cuentan los impagados en el caso de los impuestos directos.

El concejal de Hacienda recalcó que "más gasto no significa mejor gestión".

Por otro lado, dentro del orden del día, el pleno también aprobó el expediente para la concesión por concurso de parcelas en el ferial de cara a la construcción de casetas fijas. Aunque fue aprobado por unanimidad, el concejal socialista Lorenzo Blanco lamentó que el pliego de condiciones se haya elaborado con tanta premura, y solicitó algunas correcciones, como aquilatar más los deberes del concesionario para que mantenga en condiciones la caseta durante todo el año, concretar el uso de las casetas y, además, aunque la concesión es gratuita, no debería suponer gastos al ayuntamiento.