La constructora Tomás Colomer ha empezado las obras para reparar la fachada de la iglesia de Santo Domingo, que se encuentra apuntalada y su entorno vallado desde que hace casi dos meses se abrió una enorme grieta en forma de ´y´ invertida sobre la puerta principal. Como anunció desde al arzobispado el vicario, Sebastián González, el arreglo comenzaría después de las navidades, ya que esta es una obra que urge, y no podía espera, y además se pretende que pueda estar acabada para la Semana Santa, que este año se celebra del 16 al 23 de marzo.
El arzobispado encargó un proyecto de obra, que recibió el visto bueno de Patrimonio, para solucionar el problema de la fachada del templo. La obra, según el proyecto, consistirá en la colocación de unos cargaderos o vigas en la parte del dintel y por debajo del ojo de buey.
