El movimiento cívico portugués Não Apaguem a Memoria pide la paralización y reconsideración del proyecto municipal en las tapias del cementerio viejo de Badajoz, donde se fusilaron a cientos de personas el 14 de agosto de 1936.

Según recoge la agencia Efe, este colectivo remite un escrito a la Asociación para la Memoria Histórica de Extremadura, en el que plasma su oposición a la decisión municipal.

El nuevo muro de piedra que el Ayuntamiento de Badajoz pretende construir con cargo al Fondo Estatal de Inversión Local alrededor del cementerio viejo, con el coste de un millón de euros, ocultaría y desnaturalizaría las tapias del campo santo. Por ello, Não Apaguem a Memoria solicita con la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica de Extremadura la reconsideración d el proyecto y reclama la intervención de la Junta de Extremadura, como institución competente en materia de patrimonio.