La Asociación de Vecinos del Casco Antiguo no se resigna a perder la Facultad de Biblioteconomía ni la Biblioteca Regional de Extremadura. Por ello, su presidente, José María Soriano, anunció ayer que en el momento en que entre una máquina en la Alcazaba para derribar el cubo "se interpondrá una demanda en los juzgados por un atentado grave contra el Patrimonio", y ante la Junta.

Este colectivo asegura que "hay soluciones jurídicas para que este problema tenga una salida airosa y positiva" y se acoge al artículo 39 de la Ley de Patrimonio, que según Soriano se contraviene si se derriba el edificio, "que no se puede devolver ya a su estado original". La asociación vecinal mantiene que "la ejecución de una medida procesal está vulnerando una norma".