La esquina de Santa Marina con la avenida de Colón, donde están las Josefinas, y más adelante el colegio La Neja, se convierte cada mañana y a la hora de salir de clase en un tumulto de vehículos que incluso aparca en tercera fila, impidiendo el paso de quienes circulan a esas horas por este céntrico cruce.