El Aula Móvil contra la Violencia de Género, un autobús que ha recorrido 27 poblaciones desde el pasado día 14 y atendido a 3.100 personas, llegó ayer a Badajoz y, estacionado en Ramón y Cajal, atendió a diversos colectivos y a quienes tuvieron la curiosidad de acercarse a verlo. La directora del Instituto de la Mujer, Josefa Caraballo, explicó que el aula es producto de un convenio con el Ministerio de Asuntos Sociales y la Femp.
Caraballo destacó el aumento de las denuncias y la disminución de las agresiones, lo que la hizo pensar que las campañas surten efecto. Consideró que la respuesta social es muy importante, que los centros educativos, en especial de Secundaria, "responden muy bien a todas las campañas", y destacó la educación como un aspecto de gran incidencia en la Ley de Violencia. Señaló también que la mujer ya no espera 10 o 15 años para denunciar, lo que en su opinión "evita muchas muertes".
La psicóloga Marieta Sánchez señaló que el 98% de los que pasan por el aula valoran positivamente lo aprendido, adecuado en cada caso a la edad y situación del visitante, sea niño, o un colectivo de mujeres, mayores, jóvenes, policías y otros.
