Deslucida. Así quedó por culpa del mal tiempo la celebración de la fiesta de Las Candelas en Santa Marina el sábado. De las 14 agrupaciones que iban a desfilar, finalmente solo lo hicieron cuatro --Dekebais, Lancelot, Aexpainba y Batala Badajoz--, junto a escolares del colegio Arias Montano, encargados de portar al Marimanta durante su paseo hasta la pira. También se tuvo que suspender la XI Muestra de Percusión de Badajoz, en la que este año estaban inscritos una decena de grupos.

Francisco Crespo, presidente de la Asociación de Vecinos de Santa Marina, explicó que sobre la una del mismo sábado la Falcap le comunicó que las comparsas no acudirían al desfile por la amenaza de lluvia. Según Crespo, los grupos tenían temor a que se repitiera lo que ocurrió en Las Candelas de la Margen Derecha una semana antes, cuando algunos de ellos sufrieron «importantes» daños en los instrumentos a causa del agua. El presidente vecinal dijo respetar la decisión de las comparsas, aunque no la compartía, puesto que creía que cada una debería haber decidido si desfilaba o no de manera individual y no en una asamblea.

El desfile se inició sobre las 18.45 horas en el cruce de las avenidas de Colón y Santa Marina, y cuando los participantes estaban a punto de llegar a la avenida de Villanueva empezaron a caer las primeras gotas, por lo que hubo que aligerar el paso para que el Marimanta llegara a tiempo a la pira instalada en Saavedra Palmeiro, frente al párking Conquistadores, donde se convirtió en cenizas en apenas unos minutos a pesar de la lluvía, que ya había obligado a que el público sacara sus paraguas.

El mal tiempo también hizo que fueran menos las personas que se acercaron este año hasta Santa Marina para dar la bienvenida al Carnaval. Quienes fueron, pudieron degustar los hornazos (este año se habían preparado 4.500) y el vino que repartió la asociación vecinal.

Los vecinos confiaron en que el próximo año no llueva y, por fin, la pira se pueda colocar en la nueva plaza del párking.