El pleno municipal aprobó ayer la viabilidad de un nuevo plan especial en Golf Guadiana con el voto en contra de la oposición. Este punto fue el más debatido al oponerse PSOE e IU a que se autorice a Golf Guadiana a presentar un plan especial que anulará al que ahora está vigente a pesar de que éste no se ha cumplido y que algunas de sus actuaciones urbanísticas han sido denunciadas en los juzgados.

El concejal de Urbanismo, Celestino Rodolfo, explicó que lo que se aprueba es una consulta de viabilidad, que es un trámite urbanístico que tiene una importancia "muy limitada", ya que sólo es un "documento preliminar" de lo que luego será el plan especial.

Sin embargo, tanto el portavoz del PSOE, José Ramón Suárez, como el de IU, Manuel Sosa, recordaron que el plan especial vigente, aprobado por la Junta de Extremadura, debería haber concluido hace seis años y aún no se ha terminado, así como los distintos contenciosos abiertos con la empresa promotora por ilegalidades.

En este sentido apuntaron al apartahotel y la guardería que no llegaron a construir o la carpa que levantaron ilegalmente, y que el nuevo plan legalizará.

Suárez también se refirió a la petición de Golf Guadiana de la exención de reservar suelo para vivienda protegida, para dotaciones públicas o cesiones obligatorias. Mientras que Sosa denunció que en este plan de viabilidad prevé el incremento de 75.000 metros cuadrados de edificabilidad "y además no limita los 1.000 metros cuadrados por vivienda, ahora pueden ir las que quepan y adosadas", lo que considera una "especulación".

Por su parte, el concejal de Urbanismo reconoció sentirse sorprendido con que los grupos hagan "una oposición tan radical", cuando todas esas cuestiones son competencia de la Junta de Extremadura, que en caso de incumplimiento tendrá que adoptar medidas "y podrá acordar la expropiación forzosa".

Este núcleo secundario urbano (NUS) nace al amparo de la Ley de Oferta Turística Complementaria y eso obliga a la Junta a ocuparse del control.