La rotura de una tubería de la red de abastecimiento en la calle Miguel Pérez Carrascosa dejó a una parte de los residentes sin suministro de agua durante algo más de diez horas, el tiempo que los técnicos de la empresa adjudicataria del Servicio Municipal de Aguas, Aqualia, tardaron en realizar su trabajo, primero en encontrar la avería y después repararla.

Los vecinos de los número pares se quedaron sin agua hacia las siete de la mañana, aunque la inundación afectó al 8 y al 10. Algunos que bajaron a los trasteros, que están en el sótano, comprobaron que se había inundado y que el agua alcanzó 50 centímetros de altura. Una vez que avisaron a Aqualia, un equipo técnico comprobó que se trataba de una tubería de 100 milímetros de diámetro que se había roto "por causas fortuitas", según la empresa.

Una vez cortado el suministro, utilizaron un camión de saneamiento para achicar el agua del sótano. Mientras, un jefe de servicio de redes con cuatro operarios y tres vehículos trabajaron en descubrir el tramo afectado, sustituirlo y reponerlo para después cerrar el socavón, obras que concluyeron alrededor de las 17.30 horas, cuando se restableció el suministro de agua.

Muchos vecinos se enteraron al mediodía del problema, conforme volvían del trabajo.