El pleno de la corporación municipal de Badajoz sacó adelante ayer, en sesión extraordinaria, la aprobación provisional de la revisión del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) que diseña el desarrollo urbanístico de la ciudad para los próximos 15 años. Una vez solventado este paso, el plan debe someterse de nuevo a exposición pública durante un mes, dado que la admisión de abundantes alegaciones han provocado cambios estructurales en el diseño inicial.

Después pasará a la Agencia Regional de la Vivienda, aunque la concejala de Urbanismo, Cristina Herrera, avanzó que van a remitirle ya mismo el nuevo plan para que vayan viéndolo y en el caso que haya que hacer correcciones o ajustes legales, ir estudiándolos, para agilizar el proceso. Herrera expresó su confianza en que el recién nombrado presidente de esta agencia, Javier Corominas, colabore con la corporación pacense, en sintonía con el buen entendimiento que se puso de manifiesto en la reunión que mantuvieron en Badajoz el presidente de la Junta y el alcalde, donde Ibarra defendió que los planes urbanísticos corresponden a los ayuntamientos.

Finalmente el PP aprobó el nuevo PGOU en solitario, pues tanto el grupo socialista como el de IU votaron en contra, porque no están de acuerdo con la filosofía urbanística popular.

AUSENCIA El teniente de alcalde Alejandro Ramírez del Molino se ausentó de la votación, como ya hizo en la aprobación inicial, porque tiene intereses particulares en terrenos urbanizables, concretamente una docena de hectáreas entre la carretera de Olivenza y el río Guadiana, según dijo el concejal socialista Moisés Cayetano. Cristina Herrera comentó después que ellos tienen un informe jurídico según el cual Ramírez del Molino no tendría porqué haberse ausentado, "pero por si las moscas".

El grupo socialista votó en contra porque el nuevo plan multiplica la densidad edificatoria en determinadas zonas en detrimento del desarrollo de otras, traiciona el espíritu de consenso de la riada y prevé viviendas en zonas de exclusióm. El concejal de IU, Manuel Sosa, también votó en contra porque el plan apuesta por la actividad inmobiliaria y pierde toda la carga social que debería tener.

Sin embargo, la concejala de Urbanismo dijo que los argumentos de la oposición eran excusas y que es normal que el PP no acepte todas las propuestas del PSOE y de IU, porque no es su plan. "Hoy es un gran día para la ciudad. Este es el plan del diálogo y la transparencia", recalcó Herrera.