El Ayuntamiento de Badajoz dispondrá de 6 millones de euros para formar a desempleados durante los próximos dos años a través de diferentes programas y escuelas profesionales para mejorar su cualificación y que tengan así mayores opciones se encontrar un puesto de trabajo. Así lo explicó ayer el alcalde, Francisco Javier Fragoso, que compareció junto a la concejala de Desarrollo Económico y Empleo, Blanca Subirán para informar de algunas de las iniciativas en materia de formación que se pondrán en marcha en lo que resta de legislatura para tratar de reducir el paro en la ciudad, de las que se beneficiarán entre 2.000 y 2.500 personas.
Según los últimos datos, en Badajoz hay 15.475 parados, de los que más del 70% son personas que no tienen acabado el Bachillerato lo que, según destacó el alcalde, pone de manifiesto que la falta de formación es «un hándicap» para la empleabilidad. Aunque, según recordó Fragoso, cuando accedió a la alcaldía el número de desempleados superaba los 21.000, la cifra actual sigue siendo «una barbaridad», por lo que continúa siendo muy necesario reforzar las acciones en favor de la formación y el empleo.
Uno de los programas que empezará a desarrollarse tras el verano es el del Fondo de Garantía Juvenil, con una cuantía de 750.000 euros. Además, el ayuntamiento contará con 4 millones del Plan Dusi, que reserva esta cantidad para formación y empleo, especialmente entre los colectivos más vulnerables, y hoy mismo se aprobará en la Junta de Gobierno Local la solicitud a la Junta de Extremadura de una nueva escuela profesional, bautizada como Badajoz Río, a la que se sumará también la escuela taller Alpendiz 2. Asimismo, según señaló el alcalde, se continuará con el proyecto de las Lanzaderas de Empleo (para formar a 40 personas cada año) y se está trabajando para conseguir un nuevo Fondo de Garantía Juvenil y otro Pacto por el Empleo (el primero estuvo dotado con 3 millones de euros).
A través del Fondo de Garantía Juvenil, que comenzará a desarrollarse en octubre y se prolongará durante el 2018, se formará a 180 jóvenes de entre 16 y 30 años (el 30% de los desempleados de la ciudad se corresponden con este tramo de edad). El programa establece 12 certificados de profesionalidad dentro de cuatro áreas seleccionadas por el ayuntamiento en función de los principales perfiles laborales demandados por el mercado laboral local. Así, dentro de la familia profesional de comercio y márketing, se impartirán cursos de logística comercial y gestión del transporte; de auxiliares de comercio y actividades de gestión del pequeño comercio; y actividades de venta. En materia de hostelería y turismo, la oferta formativa será de operaciones básicas de cocina; de cátering; y de restaurante y bar. En el ámbito se servicios socioculturales a la sociedad se han programado un curso de Inserción laboral de personas con discapacidad, que se imparte por primera vez en la ciudad; y de Atención sociosanitaria a personas dependientes en domicilio. La última familia profesional es la de electricidad y electrónica, donde los alumnos recibirán formación en Montaje y mantenimiento de sistemas domóticos e inmóticos; y Montaje y mantenimiento de infraestructuras en telecomunicaciones en edificios.
Los alumnos que realicen estos cursos, con una duración de entre cuatro y siete meses, recibirán una beca por una cuantía mínima de 750 euros y una máxima de 1.260. Los aspirantes formarán parte de un proceso de selección y accederán al curso que más de adecúe a su perfil y currículo, para que así sus oportunidades de inserción laboral sean las mayores posibles.
Además, se contratará a personal especializado como jefe de estudios, tutores y orientadores, entre otros. Los cursos serán impartidos por empresas locales.
El alcalde confió en que obtengan resultados «tan buenos», dijo, como los del Pacto Local por el Empleo, donde el 70% de los más de mil alumnos que se formaron obtuvo un empleo con un contrato como mínimo de 6 meses.
