Cinco días después de que parte del muro anexo a la muralla abaluartada se desplomase, el concejal de Urbanismo, Celestino Rodolfo, informó ayer de que ya se ha encargado a los técnicos municipales que redacten un proyecto para su restauración. Mientras tanto, el tramo que aún sigue en pie pero que corre riesgo de derrumbe se apuntalará y se rodeará con vallas ancladas al suelo para garantizar la seguridad de peatones y vehículos.

El concejal, que aclaró que se han desplomado 8 metros de muro y no 15 como se señaló inicialmente, puntualizó que las persistentes lluvias de los últimos meses han provocado que la tierra que servía de cimentación "se esponjara" y éste se viniera abajo por deslizamiento. Por ello, el ayuntamiento intentará que el proyecto de rehabilitación se acoja a las ayudas puestas en marcha por el Gobierno central por los daños causados por el temporal, aunque previamente se habiliten fondos municipales para acometer estas actuaciones cuanto antes.

La intervención más inmediata será colocar el cerramiento en el perímetro del tramo con peligro de desplome, porque la "prioridad absoluta", según el concejal, es impedir que se produzcan daños personales o materiales. En este sentido, hizo un llamamiento a los ciudadanos para que no se acerquen a la zona.

Otra de las medidas que se adoptarán de forma inmediata es hormigonar y adecentar el carril provisional que se ha habilitado para acceder a la Vía Rápida, porque durante los próximos meses será el lugar de entrada y salida para vehículos y transeúntes.

Aunque también se hará con la mayor urgencia posible, el apuntalamiento del tramo de muro que corre riesgo de derrumbe se tardará algún tiempo más en llevar a cabo pues, según explicó el concejal, requiere un sistema de sujeción con dos anclajes que debe realizar una empresa especializada.

CON LA JUNTA Rodolfo recalcó que todas las actuaciones se pondrán en marcha en colaboración con los técnicos de la Dirección General de Patrimonio, que el lunes visitaron la zona y están elaborando un informe.

Sobre las críticas recibidas por diferentes colectivos referidas a la dejadez de las administraciones en lo que se refiere al patrimonio de la ciudad, el titular de Urbanismo reconoció que "no les falta razón", pero matizó que aunque "en el ánimo de todos estaría que hubiera fondos para rehabilitar el patrimonio histórico, no hay y no es fácil", dijo.

Rodolfo dijo que también ha encargado a los técnicos municipales que inspeccionen toda la muralla de la alcazaba para que comprueben su estado tras las lluvias.