El Ayuntamiento y la Diputación de Badajoz acaban de alcanzar un gran acuerdo, parte del cual se firmó ayer, sobre la cesión de propiedades para que cada una de estas dos administraciones asuma la titularidad de lo que le corresponde. Según explicó el concejal de Patrimonio y diputado provincial, Jesús Villalba, este contencioso se resuelve tras 14 años de negociación.

El primer traspaso alcanzado hace referencia a la parcela situada en el llano de Pardaleras que pertenece a la diputación, con cuya propiedad pretende el ayuntamiento que la Junta de Extremadura pueda construir en este espacio el nuevo colegio Nuestra Señora de Bótoa, que ahora funciona en dos edificios separados.

Según informó la diputación, el alcalde pacense, Miguel Celdrán, y el presidente de la diputación, Valentín Cortés, firmaron por la mañana en el palacio provincial las escrituras por las que se hace oficial la cesión definitiva al ayuntamiento de 21.124 metros cuadrados en Pardaleras que incluyen, por un lado, 6.670 metros cuadrados destinados al colegio y, el resto son viales y zonas verdes de los alrededores de la plaza de toros.

Se trata, según puntualizó Villalba, de un acuerdo de cesión mutua y recíproca o permuta, pues el ayuntamiento, a cambio de estas 2,1 hectáreas, cede a la diputación 1.574 metros cuadrados en Valdepasillas, que es la superficie de un edificio que ya está usando, donde se ubican actualmente el Area de Desarrollo Local y la imprenta provincial.

Pero el acuerdo no acaba aquí, sino que existe ya la intención de ampliarlo con un segundo paquete, que está preparando la Secretaría General de la diputación. Se trataría de ceder al ayuntamiento propiedades de la diputación pero que el consistorio tiene en uso. Es el caso de la Casa Luis de Morales, donde se encuentra el Museo de la Ciudad (por la calle San Pedro de Alcántara) así como el pabellón polideportivo de Las Palmeras. Ambos son utilizados por el ayuntamiento desde 1994, pero según apuntó Villalba, antes de esta fecha los trabajadores de las instalaciones deportivas dependían del organismo provincial.

Además, el ayuntamiento recibirá de la diputación la mitad de 38.750 metros cuadrados situados en la finca La Granadilla, donde se construyeron viviendas de realojo tras la riada del 97. El suelo restante se lo distribuirán a partes iguales el ayuntamiento y la diputación, con igual aprovechamiento urbanístico, es decir, con idéntico reparto de los volúmenes de construcción y los costes de urbanización.

Al mismo tiempo, la diputación cederá al ayuntamiento varias calles de su titularidad, como son la avenida Padre Tacoronte, la Carretera de la Corte y, curiosamente, las calles Sor Agustina y Manuel Fernández Megías, que circundan el antiguo Hospital Provincial y que se tienen que deslindar de la manzana que ocupa este edificio.