El Ayuntamiento de Badajoz ha encargado un estudio de los niveles de ruido en el Casco Antiguo para comprobar si este entorno debe declararse zona saturada de ruidos, lo que implicaría suspender durante un tiempo la concesión de nuevas licencias para locales de ocio, como principal consecuencia. En la ciudad, la Urbanización Guadiana ya es zona declarada por saturación de ruidos desde finales del 2008. En este caso el ayuntamiento actuó a instancias de la asociación de vecinos, que llevaba años denunciando las molestias causadas por los bares.

El estudio sonométrico ha sido encargado a la empresa especializada Eygema, la misma que hizo las mediciones en la Urbanización Guadiana. El área delimitada es la que comprende calles que confluyen a la plaza de España y aledañas, entre ellas San Juan, Nuestra Señora de la Soledad, Zurbarán, López Prudencio, Felipe Checa, Doctor Lobato, San Blas, Muñoz Torrero y Menéndez Valdés.

FESTIVOS Y LABORALES Primero se han determinado las calles donde se ha detectado mayor aglomeración de personas y de actividades que son los causantes de los ruidos y se ha acotado la zona para posteriormente medir los niveles de ruido en horario nocturno y diurno, tanto en días festivos como laborales, concretamente sábados, domingos, lunes y martes.

En estos momentos se están analizando los datos, según informó a este diario Joaquín Rodríguez, técnico de ruidos de la empresa Eygema, que está a punto de obtener los resultados. Lo que hacen es comparar los niveles de días de máxima afluencia de personas con aquellos en los que hay menos ruido y para que se considere zona saturada debe haber una diferencia superior a los 10 decibelios.

La Junta de Gobierno Local del ayuntamiento aprobó el viernes la propuesta de gasto de la Concejalía de Urbanismo de segunda fase del estudio por 8.496 euros, según informó el concejal popular Alberto Astorga, quien confirmó que no se hace a instancias de ningún colectivo sino que lo hace el ayuntamiento en zonas donde se han incrementado las actividades que pueden causar molestias a los vecinos. Astorga concreté que esta segunda fase se ha aprobado para incorporar más calles al estudio, que se inició con las más próximas a San Andrés. También mencionó que en San Juan no se pudo hacer por la interferencia de las obras en inmuebles derruidos.

Los problemas provocados por la proliferación de bares que supone una gran afluencia de clientes los fines de semana han sido denunciados por un colectivo que ha surgido espontáneamente integrado por personas que viven en este entorno. Se trata de la Plataforma Casco Antiguo Habitable, a la que pertenece Juan José Pérez, que manifestó que la declaración de zona saturada es un mecanismo que puede llegar a regular el establecimiento de negocios. Esta plataforma ya había trasladado al ayuntamiento su "preocupación" por los problemas existentes en el Casco Antiguo, que están "frenando" su recuperación.