En los artículos anteriores, he puesto de manifiesto que tenemos en los dos próximos años un gran reto para estar en condiciones de coger el tren del siglo XXI. A lo largo del año 2020 deberíamos estar conectados ya por un Tren de Altas Prestaciones (TAP) con Madrid y Lisboa, estar en uso la Plataforma Logística, el Guadiana ser un espacio lleno de actividades, el Casco Antiguo y el conjunto monumental debe haber dado un gran salto en su recuperación, los actuales proyectos como la Ronda Sur, el Hospital Provincial o el Palacio de Justicia estar concluidos y los trabajos conjuntos de lanzamiento de la Eurociudad deberían haber dado ya frutos.

Estas actuaciones no son una meta, ni una garantía de nada, son, en todo caso, el pistoletazo de salida para una nueva etapa que permita mejorar las condiciones de vida de los residentes en Badajoz y su entorno. La economía y el bienestar de una ciudad no están relacionados directamente con sus recursos, sino con las capacidades y voluntades para convertir las oportunidades en riqueza, puestos de trabajo y expectativas de futuro. De nada sirve repetir mil veces los muchos recursos y potencialidades que tenemos si nos falta la confianza en nosotros mismos de que podemos convertir una piedra, un rayo de sol o una idea en un medio de vida.

Creo que es importante que nos pongamos a trabajar, sociedad civil e instituciones públicas, en un plan de actividades para todo el año 2020 que desarrolle una dinámica de trabajo, confianza y compromisos para que todo esté a tiempo. No es necesario un presupuesto extraordinario, ni aprobaciones europeas. Basta con estar estos dos años previos trabajando conjuntamente en los eventos, festivales y recursos habituales de la Eurociudad, lo más coordinados posibles, para tener un gran programa de actividades durante ese año.

Son muchas las cosas que podemos hacer y poner en valor. Esto no es ciencia ficción, es algo a nuestro alcance si nos ponemos en ello y no perdemos el tiempo en conspiraciones y enfrentamientos cortoplacistas e inútiles. Empecemos la cuenta atrás, hasta el 1 de enero del 2020 quedan 883 días. No debemos perder más tiempo. Cada día perdido cuenta.