Muchos de los habitantes del núcleo urbano de Comayagüela, en la colonia de Monterrey de Tegucigalpa (Honduras), conocen que Badajoz existe y bastantes la tienen presente a diario. El motivo es que una de sus calles, muy transitada porque es la vía de acceso que une la parte alta de la parte baja de este barrio humilde, se denomina Ciudad de Badajoz.
La elección del nombre no ha sido arbitraria sino una muestra de agradecimiento hacia la ciudad española porque gracias a la ayuda aportada por su ayuntamiento, lo que antes era un camino empinado y pedregoso difícil de sortear se ha convertido en una escalinata con rampa y barandilla que atraviesan a diario cientos de niños para ir al colegio, vecinos para acceder a servicios sanitarios y mujeres que van a vender su mercancía a la ciudad. En reconocimiento a esta aportación, en la parte baja de la escalera ha sido colocada una placa que reza: Calle Ciudad de Badajoz. En honor al ayuntamiento de la Ciudad de Badajoz-España por el apoyo solidario al pueblo hondureño .
El origen
El proyecto partió de la Asociación Colaboración y Esfuerzo de Extremadura (Acoes.ex), que recibió el 50% de la financiación necesaria (3.990 euros) del ayuntamiento, con cargo a la partida municipal destinada a Cooperación al Desarrollo. Esta subvención corresponde al ejercicio del 2008, en el que el consistorio pacense destinó a este fin 17.000 euros, que no llegaron a agotarse porque solo se presentó a la convocatoria la asociación mencionada, con dos proyectos, ambos para Honduras. Ningún otro colectivo optó a las ayudas para protestar porque este fondo sale del presupuesto del Instituto Municipal de Servicios Sociales. La titular de esta concejalía, Rosario Gómez de la Peña, defiende que esta partida se tiene que defender necesariamente desde alguna concejalía.
Gómez de la Peña destaca que con tan poco dinero se haya podido acometer un proyecto que beneficia a tanta gente. Prueba de ello fue que de forma espontánea el Patronato de la Colonia (lo que aquí es una asociación de vecinos) decidió dedicar este acceso a Badajoz y así se lo ha comunicado al ayuntamiento. La inauguración contó incluso con el embajador de España en Honduras, Ignacio Rupérez.
