El presidente del Club Deportivo Badajoz, Manuel Pérez Lozano, denunció en declaraciones a EL PERIODICO la lamentable situación que presenta el exterior del estadio Nuevo Vivero debido a la celebración del botellón en los alrededores del campo de fútbol. "Esto está hecho una auténtica pena", aseguró.

Pérez Lozano criticó que "un campo que es una auténtica maravilla", presente esta penosa imagen, con pintadas en las paredes, aceras levantadas a causa de los coches que circulan por ellas a gran velocidad, suciedad, restos de botellas y bolsas y olor a orines.

El presidente de los blanquinegros afirmó que han presentado una queja formal ante el Ayuntamiento de Badajoz.

"El alcalde suele venir a los partidos, y ve esto, y, la verdad, es que el ayuntamiento no nos hace ni caso o no sabe donde está cada botellón ", dijo.

Los responsables del club de fútbol son conscientes de que es casi imposible que estas celebraciones se trasladen a otro lugar, una vez que los jóvenes se han acostumbrado a tomar sus copas junto al Nuevo Vivero. Por eso, el presidente cree que la única solución es "instalar una valla a su alrededor y cerrar el campo", pues aseguró que el estadio pacense es de los pocos de España que no cuenta con un cerramiento que proteja las instalaciones.

Hace más de un año que el consistorio designó este lugar --junto con el paseo Fluvial y el nuevo ferial--, para celebrar el botellón , en cumplimiento de la Ley de Ocio y Convivencia. El Nuevo Vivero es uno de los sitios que más personas congrega, sobre todo en verano, cuando este tipo de reuniones se hacen prácticamente a diario, "unas veces con más gente y otras con menos, pero todos los días", concluyó Pérez Lozano.