El servicio municipal de bomberos de Badajoz no daba abasto con las llamadas que recogía su centralita tras la tromba de agua caída sobre la ciudad entre las 9.30 y las diez de la mañana. Los bomberos no pararon en toda la mañana y realizaron más de 60 salidas.

Según calculan los agentes, pudieron caer entre 60 y 70 litros de agua por metro cuadrado en poco más de cinco minutos.

Aunque prácticamente en todas las zonas hubo problemas debido a la obstrucción de los imbornales, una de las principales incidencias se produjo en la calle San Sisenando, esquina con Madre de Dios, donde el agua llegó a alcanzar hasta una altura de metro y medio en una decena de viviendas, lo que provocó cuantiosos desperfectos en los bajos y también dañó algunos vehículos. Los vecinos estuvieron sacando agua toda la mañana y algunos llegaron a levantar tabiques de contención.

Los agentes atendieron avisos en viviendas, sótanos, ascensores, garajes y almacenes que quedaron totalmente anegados, como es el caso de un bar en la calle Portalegre, en la barriada de la Estación, donde incluso había una nevera flotando.

También hubo problemas de tráfico en algunos puntos de la ciudad. Los bomberos tuvieron que cortar la carretera de la Corte y Santo Cristo de la Paz durante 15 minutos.