Cuando esta tarde se abra el portón del patio de caballos del coso de Pardaleras, a las diecinueve treinta horas, media hora antes que lo habitual años pasados, dará inicio una feria con buenos carteles pero con alguna ausencia que nunca debería de haberse producido. Me refiero, porque está en la mente de muchos aficionados, a la de Alejandro Talavante.
Ciertamente el festejo de esta tarde es de gran interés. Este año sí torean juntos Hermoso de Mendoza y Diego Ventura, algo que sin ir más lejos el pasado trataba de evitar el caballero navarro. Se juntan quien ha marcado un antes y un después en el toreo a caballo, y un joven arrollador que se atreve a disputar la primacía. Estará también Manuel Lupi, hijo del gran José Samuel, quien tomará la alternativa, y los toros serán de Los Espartales, toda una garantía.
Mañana en Badajoz va a ser un día muy especial, pues por primera vez van a alternar en Extremadura José Tomás y Miguel Angel Perera. Será el cuarto enfrentamiento entre estos dos grandes toreros, ambos con un concepto muy puro: el de Galapagar un diestro ya de leyenda cuando aún está en activo por la verdad de su toreo, y nuestro paisano, un torero ya en la cumbre que va a marcar una época, pues sus señas de identidad son el valor, la perfección técnica y una forma única de llevar a los toros por abajo. Por delante irá Pedrito de Portugal, ante la imposibilidad de que lo haga por estar cogido El Fundi, y los toros serán de una ganadería de primera fila como es la de Jandilla.
El lunes repite Miguel Angel Perera, en lo que bien puede ser un homenaje a este torero de la afición de su tierra. Abrirá cartel Antonio Ferrera, junto al de Puebla del Prior el único que repite en la feria, y lo completa Morante de la Puebla, un diestro genial que llega a Badajoz tras sublimar el toreo en Sevilla y Madrid. Ese día se va a lidiar un encierro de Zalduendo.
El martes 23 se da un cartel ya habitual en esta importante feria, con toros y toreros extremeños. Repite tras el éxito del pasado año la vacada de los Herederos de Bernardino Píriz y también vuelven Javier Solís y Santiago Ambel Posada, que tan destacada actuación tuvieran entonces. A ambos se les une el cacereño Jairo Miguel, una novedad y una gran atracción por su juventud y buenas maneras. Ese día la plaza de Badajoz será la plaza de toda Extremadura, pues la corrida será televisada en directo por el canal autonómico.
La feria culmina el día del patrón San Juan con una corrida de ocho toros un tanto extraña por lo inusual del cartel. Enrique Ponce, gran figura del toreo, siempre incombustible, encabezará el paseíllo. Le acompañan en lo que será su segunda tarde Antonio Ferrera, con un gran predicamento en su tierra, y El Juli, un torero que si bien perdió la atracción de su precocidad y juventud, ha ganado en madurez para ser considerado hoy maestro indiscutible. El cuarto espada será un Cayetano en no muy buen momento, y los toros serán de Daniel Ruiz.
José María Manzanares bien podría haber estado en esta feria, y sobre todo Talavante como figura que es, no ya porque sea de Badajoz. Y es que el joven torero se ha quedado fuera por desencuentros de despacho que le son ajenos.
