Lo ocurrido en el último pleno ordinario del Ayuntamiento de Badajoz no se va a quedar solo en el acta de la sesión, sino que va a tener sus consecuencias en las relaciones entre los grupos de la oposición y el gobierno municipal, fundamentalmente entre el PSOE y el PP. Ayer, el portavoz socialista, Ricardo Cabezas, y el alcalde, Francisco Javier Fragoso, se acusaron mutuamente de ser los instigadores de la crispación.

Cabezas compareció en rueda de prensa para valorar el «bochornoso» pleno del viernes, que su grupo abandonó después de que el alcalde echase al portavoz. Según el concejal socialista, todo lo ocurrido responde a «una estrategia deliberada de provocación» para buscar «la crispación» y acusó al alcalde de comportarse con «abuso de mando». Según Cabezas, Fragoso es «un auténtico pirómano» de la vida municipal y cuando ordena los plenos interpreta el reglamento «como le viene en gana». Cabezas negó que su compañero de grupo, Emilio Pérez, insultase a la concejala de Ciudadanos, Julia Timón, en la exposición de argumentos sobre la subida del IBI, que provocó que abandonase la sesión. «Esto ya estaba preparado», señaló Cabezas, quien aconsejó a la concejala de Cs que «lo deje o dé un paso al lado» si no es capaz de «aguantar la presión», pues «no puede ser que tenga la sensibilidad tan fina». También se refirió a lo ocurrido con el concejal no adscrito, Lus García-Borruel, al que Fragoso expulsó porque Borruel lo acusó de mentir cuando dijo que había llevado a su despacho a un empresario para ver el pliego de las leds. Cabezas reprochó a Fragoso que exponga situaciones que ocurren en su despacho y dijo que si no lo sacó en su día fue porque «en aquel momento le interesaba ser cómplice».

Al ser preguntado por estas acusaciones, el alcalde respondió que forman parte de la campaña de Cabezas en el proceso de primarias en el que está inmerso su partido para la elección del secretario general de la agrupación local. «Le deseo mucha suerte porque creo que es lo mejor que me puede ocurrir a mí como Partido Popular», dijo.

Respecto al mal clima generado en el último pleno señaló que él actúa «a reacción en cuestiones que me parecen impresentables porque empezaron ellos llamando portada de revista a una concejala a la que yo tengo obligación de amparar como presidente, independientemente de que sea de mi grupo». El alcalde defendió que cada uno debe hacer «su examen de conciencia».

En cuanto a que se pueda enderezar el diálogo con la oposición en lo que queda de legislatura, mostró su deseo de que así sea porque «voluntad no me va a faltar», pero hasta ahora «los que han demostrado no querer llegar nunca a ningún acuerdo son ellos, yo he llegado a acuerdos con Podemos y con Ciudadanos, pero con el PSOE ha sido imposible, porque estaban en otra cosa, antes en la moción de censura y ahora en las primarias».

También Julia Timón habló de lo ocurrido en el pleno y acusó al PSOE de buscar «la confrontación directa conmigo, tergiversando y enmarañando una vez más las propuestas que llegan desde nuestro grupo».