Los miembros del Campamento Dignidad mantienen su encierro en la iglesia de San Juan Bautista, en la plaza Minayo, después de que el cabildo rechazara ayer su solicitud de permanecer en la catedral hasta el próximo 4 de enero. El desalojo del templo catedralicio y el traslado al local de la parroquia que ocupaba la antigua librería diocesana se llevó a cabo sobre las dos de la tarde y sin ningún tipo de incidente.

El acuerdo inicial con el arzobispado era que el campamento desalojaría ayer la capilla del claustro que ocupaban desde el pasado día 23, pero sus integrantes decidieron solicitar al arzobispado que ese plazo se prolongara. Tras la celebración de una concentración, miembros del Campamento Dignidad, acompañados por representantes de distintos grupos políticos, sindicatos y organizaciones sociales que secundan sus reivindicaciones, accedieron a la sede del arzobispado para plantear su demanda al vicario general, Sebastián González, quien les recordó el "pacto" que habían alcanzado y rechazó la posibilidad de que la protesta continuara en el templo catedralicio, pues el cabildo ya había tomado una decisión al respecto. No obstante, González les comunicó que si llegaban a un acuerdo con una parroquia para trasladarse, el arzobispado no pondría ninguna objección.

La negativa a que el encierro continuase en la catedral provocó algunos momentos de tensión en el arzobispado. Finalmente, el vicario se reunió con varios miembros del campamento, aunque su postura continuó inamovible. Fue tras este encuentro, cuando se negoció con el párroco de San Juan Bautista el traslado a esta iglesia, a lo que tras un largo encuentro accedió.

Los miembros de Campamento Dignidad recibieron ayer el respaldo del PSOE, IU, sindicatos, numerosas organizaciones sociales, oenegés y colectivos vecinales. Manuel Cañada, uno de sus miembros, agradeció su apoyo y recordó que con este encierro quieren denunciar "la planificación de la miseria" que se está haciendo en el país y en la región, por lo que exigen el pago de la Renta Básica y la eliminación de trabas para solicitarla, el fin de los desahucios y que ningún desempleado se quede sin protección.