La campaña que ha desarrollado la Policía Local de Badajoz para intentar poner coto a la actividad de los aparcacoches ilegales se ha saldado con 29 denuncias, ocho de ellas administrativas y el resto por vía penal, según los datos que facilitó ayer el inspector Antonio Nogales. En el primer caso se les ha sancionado por incumplir la ordenanza municipal y en el segundo, por una falta de desobediencia a la autoridad y persistir en esta actividad a pesar de haber sido denunciados.

Esta campaña, según Nogales, ha permitido elaborar un "mapa" con las zonas donde los gorrilas ejercen habitualmente --donde se han centrado los controles policiales--, así como constatar que el número de aparcacoches ilegales (unos 25, entre españoles y extranjeros) no se ha incrementado, un hecho que el inspector achaca en gran medida al trabajo diario que realiza la policía local contra esta actividad.

Nogales adelantó que está previsto realizar otra campaña similar a finales de mayo o junio aunque, en esta ocasión, se intensificarán los controles en zonas de copas como la Urbanización Guadiana y la avenida Sinforiano Madroñero durante las noches de los fines de semana. Aunque reconoció que es muy complicado acabar con la actividad de los aparcacoches ilegales, el inspector recordó que los ciudadanos pueden contribuir a este objetivo denunciando a los gorrillas o no premiando con dinero esta práctica.