Eudald Carbonell unió la evolución humana a las consecuencias de la intervención del hombre en los cambios térmico y ecológicos. Afirmó que "somos la última hoja del árbol de la evolución y estamos en un frágil equilibrio" con el actual cambio climático ya confirmado. Según dijo, "vendrá una época de glaciación, de desestructuración climática, consecuencia de la intervención del hombre en el ciclo natural con la contaminación". Y añadió que "sólo conociendo críticamente el pasado se puede responder al proceso térmico y ecológico actual. Somos la conciencia viva del planeta y hay que cambiar la organización social para que sobreviva la especie".