Cáritas busca ayuda en las instituciones y apoyos en la sociedad civil para abrir un centro de día en el Casco Antiguo de Badajoz, en el que se pueda atender a personas indigentes, sin hogar, que viven en la calle y que por alguna razón no están o no entran en el Centro Hermano de transeúntes u otros centros especializados. El objetivo sería proporcionarles un primer contacto de apoyo y asesoramiento para ayudarles a salir de su situación, según manifestó ayer el director del Area de Inclusión Social de la oenegé, Pedro Herrera.
Herrera efectuó estas declaraciones en respuesta a este diario, en relación a la capacidad de que tiene Cáritas para atender a transeúntes en el Centro Hermano, de Badajoz, y el Padre Cristóbal, de Mérida. Cuentan con 28 plazas cada uno, si bien en la capital pacense esta organización tiene localizadas a más de 30 personas que viven en la calle, a las que se podría prestar un servicio en ese centro de día.
Afirmó Herrera que en este centro de día se podría tener atendidas y recogidas a estas personas, que si bien acudirían a los comedores sociales que hay en Martín Cansado y en San Pedro de Alcántara, podrían pasar la mañana y la tarde realizando algún tipo de actividad, de formación o recibiendo atención para normalizar sus vidas.
PREVENCION El centro se ubicaría en un inmueble que tiene Cáritas en la esquina de las calles Benegas y Bravo Murillo, que tendría que ser acondicionado y atendido por voluntarios.
En una parte de este edificio, en la actualidad se presta atención ambulatoria por parte de cuatro trabajadores y voluntarios a entre 40 y 50 personas en proceso de deshabituación o con otros problemas, familiares o económicos, pero que no están en la calle, pues tiene acomodo con sus familias y no sufren ese desarraigo. "Ahí se hace una labor muy importante y seria de prevención para que no terminen en la calle, aseguró Herrera.
Cáritas cuenta además con dos pisos en Badajoz y uno en Mérida, con capacidad para tres o cuatro personas cada uno, en los que quienes han pasado por el Centro Hermano u otros servicios culminan su proceso de inserción tras haber superado alguna adicción, o problemas de salud mental para lo que hay un tratamiento continuado con seguimiento, hasta que encuentran un empleo y normalizan sus vidas.
Así mismo, Cáritas, sigue a la espera de que tras el convenio entre el ayuntamiento y la universidad para la cesión de una parcela de algo más de 3.000 metros cuadrados, junto a la antigua Escuela de Industriales, se materialice para consolidar el servicio que presta el Centro Hermano en ese lugar desde hace 12 años, cuando se trasladaron de la zona de La Estación. Aguarda a que se produzca una vez superados "unos problemas de registro".
DONACION DE LA ABOGACIA Por otro lado, Pedro Herrera hizo estas declaraciones tras el acto de entrega a Cáritas Diocesana de 5.481,74 euros del 0,7% del presupuesto del Colegio de Abogados de Badajoz. Su decana, Filomena Peláez, entregó sendos cheques de 2.740,87 euros a Sarai Flores, del Centro Hermano, de Badajoz, y a Ana Belén, del Centro Padre Cristóbal, de Mérida.
Pélaez destacó que la directiva del colegio elige cada año a las oenegés a las que destinarán su 0,7%, "para reconocer la labor social que realizan". Y añadió que "teníamos interés en que se beneficiara a toda la provincia, por eso se han elegido los dos centros, uno de Badajoz y otro de Mérida".
