El consiliario de Cáritas Diocesana Mérida-Badajoz, Vicente Martín, reconoce que algunas Cáritas parroquiales están "desbordadas" ante el aumento de peticiones de ayuda surgidas por la crisis económica, por lo que se han visto obligados a hacer un "sobre esfuerzo".

Según la agencia Efe, Martín cifra en un porcentaje cercano al 40 por ciento el aumento de ayudas solicitadas por causa de la crisis económica ante lo que Cáritas Mérida-Badajoz está haciendo un "sobre esfuerzo" para atender estas demandas y continuar con sus labores habituales.

Asimismo y como párroco de las barriadas de Gurugú y Colorines en Badajoz, indica que entre septiembre y diciembre de este año han recibido 140 peticiones de solicitantes que, principalmente, demandan alimentos y ayudas para pagar el alquiler, suministros o deudas contraídas.

Al respecto, subraya que con motivo de estas fechas navideñas han lanzado una campaña de sensibilización bajo el lema Una sociedad con valores es una sociedad de futuro que pretende concienciar de que la sociedad actual consta de valores "dominantes" que potencian la desigualdad y exclusión social.

Ante ello, propone valores alternativos que permitan remodelar la sociedad haciéndola más humana, integradora y habitable para todos, especialmente, para los que viven al margen y los excluidos.

Por su parte, la secretaria general de Cáritas Diocesana Mérida-Badajoz, Ana Correa, da a conocer la memoria de actividades del año 2008 cuando atendieron en el territorio a 16.160 personas de las que 566 pertenecían al Proyecto Vida, 223 no tenían empleo, 1.298 hogar y 35 realizaron trabajos en beneficio de la comunidad.

Para llevar a cabo estas acciones, además de intervenir en nueve campañas de emergencia, invirtieron 1,950 millones de euros de los que 54.149 se destinaron a proyectos de ayuda al desarrollo y 10.587 a emergencias.

Entre los programas y proyectos que Cáritas Mérida-Badajoz está llevando a cabo, su director ha querido resaltar el estudio "Historias a la intemperie" por el que ya han entrevistado a 50 personas sin techo que viven en las calles de estas dos ciudades.

Mediante este estudio, pretenden ayudar a este colectivo de personas preguntándoles por sus historias personales para analizar las encuestas y, posteriormente, estudiar propuestas para dignificar sus vidas.

Destaca que para ello cuentan con un equipo técnico, conformado por un psicólogo, dos trabajadores sociales y dos educadores sociales y otro grupo de trabajo de campo en el que están participando estudiantes, graduados y universitarios extremeños y voluntarios de Cáritas parroquiales de Mérida y Badajoz.

Al mismo tiempo, pide la colaboración, con objeto de hacerles partícipes del proyecto y que contribuyan a proponer vías de solución, a los ayuntamientos de Mérida y Badajoz y a la Junta de Extremadura.