Con ripios, basuras y lavado de coches, sólo falta un campista bajo el cartel de la Confederación Hidrográfica que pide la colaboración de los ciudadanos para mantener limpia la zona de El Pico, en el Guadiana y su entorno. La actuación de algunos convecinos parece ser algo más destructora y desleal que la de satisfacer una urgencia.