La asociación de vecinos del Casco Antiguo se apresuró ayer a proponer varios destinos al dinero que llegará a Badajoz procedente del Fondo Estatal de Inversión Local.

Todavía no se había reunido la delegada del Gobierno, Carmen Pereira, con los alcaldes de los municipios para informales sobre la aplicación del fondo de 8.000 millones, de los que a Extremadura le corresponden 193, cuando el presidente del Casco Antiguo, José María Soriano, puso sobre la mesa los proyectos que considera se deben acometer con los cerca de 26 millones de euros que corresponderían a Badajoz con el fin de avanzar en la recuperación del casco viejo.

Las primeras "y más prioritarias" de las actuaciones que solicitan los vecinos es el soterramiento de los contenedores de basura en el perímetro del Casco Antiguo, que ahora ofrecen una imagen "tercermundista" de la zona, así como la renovación del pavimento de las calles peatonales, que se encuentra "muy deteriorado, con losetas rotas, muy sucias por impregnación de manchas, con las alcantarillas centrales obstruidas y destrozadas que originan malos olores".

Con estos cambios, "las calles cambiarían de aspecto notablemente", según Soriano, quien también reivindicó que se utilice parte de estos fondos extraordinarios para hacer una guardería infantil en el barrio y un aparcamiento subterráneo en el baluarte del Campillo con unas instalaciones deportivas, de unos 5.000 metros cuadrados, en su superficie, servicios de los que ahora adolece el Casco Antiguo.

También considera importante la creación de una biblioteca municipal, ya que los vecinos utilizan ahora la del Estado, pero ésta se trasladará al viejo ferial, y abordar con estos fondos la rehabilitación del viejo mercado de Santa Ana.

En opinión de Soriano, éstas "son peticiones razonables y realizables", que supondrían un coste aproximado a los 5 millones de euros.