La Asociación de Vecinos del Casco Antiguo urge al ayuntamiento el inicio de las obras de construcción del anunciado aparcamiento en la zona del Campillo y el subterráneo de la calle Estadium, junto al palacio de congresos, y sobre el unas nuevas instalaciones deportivas. Así lo manifestó ayer el vicepresidente de la asociación, José María Soriano, durante la celebración de las fiestas patronales del barrio, san José, en El Campillo, donde el consistorio prevé construir un aparcamiento sobre el baluarte y viviendas al otro lado de la Vía Rápida, por parte de la Inmobiliaria Municipal, que ya ha adquirido algunas de las viejas viviendas para su derribo y ampliar el solar de actuación.

Soriano señaló la importancia de abordar este proyecto "para que no se quede solo en un anuncio", y el interés de la asociación por la reordenación del espacio y las instalaciones existentes entre la residencia Juan XXIII y el palacio de congresos.

Opina que además de resolver la falta de espacio para aparcar que tiene la zona y el entorno del auditorio Manuel Rojas, "el barrio necesita también unas nuevas instalaciones deportivas, dado que es el único que carece de ellas" y recuerda que las existentes están "impracticables, además de que el año pasado hubo que cerrar la piscina".

REHABILITACIONES El Casco Antiguo también está pendiente de la rehabilitación del convento de las Adoratrices, que debió comenzar en febrero y que se ha retrasado hasta que se celebre una reunión de la Comisión Junta-Iglesia. La asociación no entiende por qué la Iglesia no ha mostrado interés por comenzar el trabajo cuanto antes. Además, también espera que se resuelva el nuevo concurso para la adjudicación del proyecto de recuperación de San Agustín, después de ajustar el presupuesto tras quedar el primero desierto.

El vecindario del centro histórico, según José María Soriano, se queja permanente por la suciedad que asola la zona. "Necesitamos un plan de limpieza de verdad, que no consista solo en regar o barrer; se necesita restregar algunas zonas y poner medios para que se mantenga limpia", por higiene de los vecinos y porque el Casco Antiguo es la tarjeta de presentación de la ciudad ante el visitante, dijo.

Por otro lado, cientos de personas participaron en las fiestas patronales con una degustación de perrunillas y aguardiente, la suelta de una vaquilla y una garbanzada para reponer fuerzas.