La Asociación de Vecinos del Casco Antiguo considera excesiva la protección urbanística, porque ello perjudica su desarrollo y el proceso de rehabilitación, por lo que propone que se revise el catálogo de protección del Plan General de Ordenación (PGOU), para reducir de 9 a 3 los tipos que contempla, según los directivos de la citada asociación Juan Pedro Plaza, Emilio Doncel y José María Soriano.

Esta es una de las propuestas que se recogen en las alegaciones que el colectivo vecinal ha hecho al PGOU, con la que pretende una menor protección para hacer la zona más habitable. La idea es que el catálogo recoja sólo los edificios que posean valores intrínsecos y necesiten protección, evitando "un excesivo y generalizado proteccionismo para edificaciones en las que no esté justificado", explican.

Por ello proponen 3 tipos de protección: integral, para edificios monumentales y por razones histórico-artísticas; ambiental, por su estructura morfológica, permitiendo la actuación sin modificar su autenticidad; y paisajística, para conservar aspectos tipológicos. En este sentido, insisten en la necesidad de preservar las fachadas.

Emilio Doncel manifestó que "tanto proteccionismo no beneficia, se necesita que viva gente, queremos que venga la gente a vivir", y destacó que cuando se termine de construir en la calle Prim, "esa zona tirará del carro, pero más arriba hay problemas para invertir, entre la Soledad y la plaza Alta, o de San Andrés a San Juan, por ejemplo".

RESPONSABILIDAD DE TODOS Plaza afirmó que "la degradación es responsabilidad de todos" y aseguró que se debe hacer una ciudad para las personas y no al contrario. El casco antiguo, dijo, "no debe ser un museo", sino algo "vivo y habitable". Reconoció que se hacen cosas, "pero falta el empujón definitivo".

Por ello, la asociación, además de pedir que se permita la segregación de parcelas cuando las necesidades así lo requieran, y la agregación de unidades que conformen parcelas mayores para las edificaciones que requiere la zona, también reclama un plan especial con un estudio económico, por etapas cuatrienales. También demanda una financiación y un plan de ayudas a la rehabilitación, así como la creación de un órgano específico de gestión con personalidad jurídica, "que unifique gestiones criterios y voluntades".

Además, la asociación propone que no se contemple el centro como zona peatonal por ser "regresivo" y una "barrera para la penetración de peatones y los vehículos necesarios para los diversos servicios". También se requiere la construcción de aparcamientos a corto plazo y que se obligue a que los nuevos edificios tengan sus garajes.