Badajoz se quedará sin presupuestos municipales hasta después de la celebración de las elecciones del 25 de mayo y en espera de que se constituya la nueva corporación del ayuntamiento, según anunció ayer el alcalde, el popular Miguel Celdrán.

El alcalde afirmó que "no hay necesidad ninguna" de que la corporación actual apruebe ya los presupuestos, "porque el ayuntamiento no se paraliza, pues hay algunos ayuntamientos socialistas que los mantienen prorrogados 5 o 9 años". Celdrán reconoció que "lo normal, lo más corriente, lo más beneficioso y recomendable es aprobar los presupuestos", pero se da la circunstancia de que "este es un año excepcional" por las elecciones. El alcalde apuntó que él podría aprobar un presupuesto, de tal manera que si ganase "haré lo que me dé la gana y si pierdo voy a dejar una buena" al que lo suceda. Pero Celdrán añadió que él no es capaz de hacerlo. "Eso a lo mejor lo hacen ellos (la oposición)", dijo.

MANOS LIBRES

El alcalde popular defendió que esta decisión permitirá que el próximo alcalde "tenga un poco las manos libres para organizarse".

Celdrán dijo que no es otro el motivo y, de hecho, el concejal de Hacienda, Nicasio Monterde, le ha preguntado si se llevaban los presupuestos al próximo pleno para su aprobación, porque están prácticamente confeccionados. Tal es así que uno de los documentos que manejan entidades bancarias como La Caixa, para ofrecer préstamos al ayuntamiento a la vista de su situación financiera, es el presupuesto del 2003, según una carta enviada a Monterde, quien sin embargo lo atribuyó a un error.