La obra de adecuación ambiental de las márgenes de los arroyos Rivillas y Calamón en su recorrido urbano ha comenzado ya con los movimientos de tierra junto al puente de la N-V. Las máquinas acondicionan el terreno para hacer una balsa en la confluencia de los dos arroyos, que tendrá una función de regulación, ya que hará de depósito de agua, y otra estética.

Tras concluir las obras de encauzamiento del Rivillas y el Calamón para prevenir futuras avenidas, la Confederación Hidrográfica del Guadiana (CHG) ha iniciado hace unos días la obra de adecuación y restauración paisajística de las márgenes de estos arroyos, desde el inicio del encauzamiento hasta su desembocadura en el río Guadiana.

Esta actuación, cuyo plazo de ejecución es de 12 meses, convertirá este espacio ahora degradado en un gran corredor verde o parque fluvial con caminos de trazado irregular, zonas de estancia y varias zonas de usos recreativos y deportivos abiertos a los vecinos. Tendrá un auditorio al aire y juegos infantiles.

En un año se habrá revalorizado toda la zona, que discurre por barriadas como Antonio Domínguez, Cerro de Reyes y el Calamón, las más afectadas por la riada de noviembre de 1997, que obligó a estas obras.

Se actuará en un trazado de más de 4 kilómetros, en el que la vegetación tendrá un papel relevante, ya que se plantarán 3.031 árboles de más de una veintena de especies, 63.170 arbustos y 144.464 metros cuadrados de pradera. El importe del proyecto asciende a 4 millones de euros.

CON AGUA DEL GUADIANA En estos momentos se están acondicionando las pendientes del terreno y se han iniciado los movimientos de tierra para instalar el sistema de riego, que es bastante novedoso, ya que captará e impulsará el agua del Guadiana para regar todo el parque, algo que hasta ahora no se había hecho en la ciudad, a pesar de tener el río tan próximo.

"El trabajo previo de planificación ya se ha cerrado, con lo que cada día irán llegando más máquinas", según explicó Nicolás Cifuentes, el director de la obra. La CHG ya ha hecho la reserva de plantas a los viveros, "porque son muchas y hay que hacer con antelación el encargo, sino cuando llega la época no encuentras plantas suficientes".

También se ha encontrado ya la tierra vegetal que se empleará para este parque fluvial, porque "uno de los problemas de este proyecto era encontrar una tierra vegetal en cantidad y calidad suficiente, hay mucha tierra agrícola pero no para un parque", señaló.

CAMINOS ACCESIBLES En estos momentos se están revisando los caminos para garantizar la accesibilidad de las personas con minusvalía, ya que el terreno en algunos puntos tiene unas alturas y pendientes acentuadas. "Se cumplirá la normativa".

El proyecto contempla dos paseos fluviales importantes sobre dos motas laterales que separan el parque de la zona urbana, situados en la parte más alta del canal. Tienen tres metros de ancho y estarán iluminados. Servirán para el paseo y desde ellos se observará, abajo, en la parte interior del canal, la zona ajardinada, con las instalaciones recreativas y deportivas.

Será un corredor ininterrumpido, desde el encauzamiento hasta la desembocadura en El Pico de La Pesquera, junto al puente de la Autonomía, y la CHG desea que las instalaciones estén distribuidas homogéneamente en todo el tramo, aunque el director de la obra reconoció que, "es una franja de terreno estrecha, y en algunos puntos a penas hay zona verde, por eso las instalaciones deportivas van donde hay más terrenos, junto a la carretera de Sevilla y a la antigua N-5". El auditorio se hará junto a El Pico, frente a la Alcazaba.

Estas obras se harán en terrenos que la CHG expropió para la obra hidráulica, a los que se sumarán otros cedidos por el ayuntamiento, por lo que no habrá que realizar expropiaciones.