La nocturnidad no es una condición indispensable para celebrar el botellón . Así lo demostraron ayer cientos de jóvenes que desde primeras horas de la tarde ocuparon literalmente el paseo de los locales del río para celebrar que comenzaban las vacaciones navideñas.

El inicio de las vacaciones en los centros educativos de la ciudad viene siendo motivo de alerta policial, pero ayer por la mañana no se produjo ningún problema, según fuentes de la policía local y, de hecho, apenas se detectaron grupos en ninguno de los lugares habituales de las aglomeraciones. Sin embargo, hacia las tres de la tarde la presencia se hizo más visible en el paseo Fluvial y antes de las cinco puerta Palmas estaba colmado de chicos cargados con bolsas llenas de bebidas, hielo y vasos. Las tiendas de la esquina de la plaza de los Reyes Católicos no daban abasto.

A la hora de cierre de esta edición tan sólo se había registrado un incidente sin mayores consecuencias, según los datos de la policía local. Una joven sufrió una herida en una ceja por el lanzamiento de un hielo y tuvo que se atendida por el 112.

Además de los locales del río y los alrededores de puerta Palma, por la tarde también hubo aglomeraciones de jóvenes en las cercanías del instituto Rodríguez Moñino, en República Dominicana, junto a la discoteca Neo.