Una vez más, el bombero y voluntario de Adana Sergio Gausach volvió a descender ayer por la tarde a la isla del Guadiana donde habita una numerosa colonia de gatos para evaluar la situación en la que se encuentran, llevarles comida y limpiar la zona de la suciedad que deja tras de sí la comida que muchos ciudadanos arrojan.

Esta vez estuvo acompañado por la bióloga y vicepresidenta de Adana, Raquel García-Hierro, y otros voluntarios, que cámara de fotos en mano se dedicó a fotografiar a los gatos para realizar un censo, saber cuántos machos y cuántas hembras hay y determinar las razas que cohabitan en la isla. Una vez hecha la evaluación, Adana estudiará qué opciones existen para intervenir en la zona y frenar la natalidad, ya que estiman que la colonia supera la treintena de gatos.

Raquel García-Hierro reconoció que no será fácil encontrar una solución, puesto que con los medios de los que disponen no tienen capacidad para esterilizar a las hembras --las jaulas trampas son demasiado pesadas para bajarlas y por su tamaño podrían dañar a otras especies como los meloncillos-- y de otra forma es muy difícil atrapar a los gatos porque están asilvestrados.

Con este descenso a la isla, Gausach también quiso hacer una demostración de qué clase de comida y cómo se debe echar a la isla para que no se ensucie la zona.