El presidente del Colegio Oficial de Médicos de Badajoz, Pedro Hidalgo, manifestó ayer a EL PERIODICO la necesidad de contar con medios de protección y medidas de seguridad en los centros sanitarios de la provincia, especialmente en el mundo rural, para acabar con las agresiones a médicos, un problema que va en aumento y está más extendido de los que se piensa.

Hidalgo afirmó que sólo hay personal de seguridad en los hospitales y en algunos centros de salud urbanos a tiempo parcial, pero no en los del mundo rural, "que están abiertos 24 horas sin la menor protección".

Estas manifestaciones las hizo el presidente del Colegio profesional a raíz de conocerse que la junta directiva del mismo se ha personado como acusación particular en dos causas judiciales por sendas agresiones a médicos, en un centro de salud del Area Sanitaria de Badajoz, en la comarca de Olivenza, y en otro de Villanueva de la Serena.

El Colegio de Médicos mantiene que la violencia contra el profesional está en ascenso y que el primer paso para frenar este problema es que todos los que sufran algún tipo de agresión lo comuniquen, algo "imprescindible para poder actuar ante los órganos judiciales, pues sólo conociendo la naturaleza de las agresiones, dónde y cómo se han originado, podemos atajarlas".

DENUNCIAS Y QUERELLAS Asimismo, la entidad anuncia que las denuncias o querellas derivadas de agresiones "se canalizarán como delitos de atentado contra la autoridad o funcionario público". Hidalgo aseguró que "éste es un problema prioritario en el que estamos en total sintonía con el SES", que "nos sentimos totalmente respaldados y debemos tener la máxima colaboración porque, en todo caso, son sus trabajadores". Ayer no fue posible obtener un pronunciamiento del SES.

El presidente del Colegio consideró que este asunto incumbe a colegios, Administración, sindicatos e interlocutores sociales "en pro de garantizar la calidad asistencial dentro de un ambiente óptimo de empatía entre médicos y pacientes" y "exigimos" a los usuarios del sistema sanitario, público y privado --aunque dijo que se producen más casos en el primero, por ser mayor el número de pacientes--, "el mismo trato y formas que el médico dispensa a diario".

Hidalgo explicó que además de las agresiones físicas, las más comunes son las verbales y las vejaciones a los profesionales, de forma especial contra las mujeres "y no son permisibles". Aunque no pudo ofrecer datos sobre cuántas agresiones se producen, dijo que "mi equipo de gobierno y yo acabamos de llegar y a los 20 días de la toma de posesión hacemos frente al problema como nos comprometimos", pero consideró que "tenemos que romper el efecto iceberg".