Después de cuatro días sin clases por el puente de Los Santos, los niños y los maestros de la UVA se encontraron ayer al volver a su colegio, el Nuestra Señora de Fátima, con la desagradable sorpresa de que el centro había sido asaltado durante el fin de semana y en sus aulas estaban trabajando agentes de la policía judicial y la científica. Ante esta situación, las clases tuvieron que suspenderse.

El panorama era desolador, el rastro de los asaltantes era palpable en casi todos los rincones del colegio, al que entraron por el patio, desde donde rompieron los barrotes de una de las ventanas para acceder al interior. Tras forzar las puertas de las aulas, que estaban cerradas con llave, se llevaron seis ordenadores nuevos, algunos sin estrenar, que la Consejería de Educación había cedido recientemente, así como el proyector de la pizarra digital, varias impresoras, los radiocasetes y seis guitarras de las clases extraescolares.

Pero además causaron numerosos destrozos, ya que forzaron las mesas de los profesores y los armarios, dejando esparcidos por el suelo el material escolar y los trabajos de los niños.

Tuvieron incluso tiempo para hacer pintadas ofensivas alusivas a los docentes. En la mesa de una maestra escribieron con rotulador "Tus muertos" y también en una de las pizarras pusieron "Tus muertos profesores".

El lugar en el que causaron más desperfectos fue en la sala de profesores, donde destrozaron la máquina de café para llevarse el dinero, pintaron las paredes y revolvieron todo.

En el patio dejaron junto a la valla por donde entraron tres monitores de ordenador y varios guantes de los que emplearon para cometer el robo. Sin embargo, parece que nadie escuchó nada, ni siquiera el conserje.

Fue el encargado de mantenimiento el que avisó de lo ocurrido a las 7.30 horas de ayer a la directora del colegio, Carmina García, quien explicó "que se han suspendido las clases porque no se podía entrar en las aulas, estaba todo revuelto, la policía dentro y luego nosotros teníamos que ordenarlo todo".

CONOCIAN EL CENTRO Según indicó, "el robo se ha cometido en la madrugada del sábado al domingo, porque el domingo ya se comentaba por el barrio que había ordenadores por el suelo", sin embargo el conserje no se enteró de nada ni tampoco avisó ningún vecino. "Aquí no llama nadie a la policía, el miedo a las represalias es tremendo", señaló.

Carmina García mantiene que "los que han venido conocían el centro, prueba de ello es que hay una clase que no han forzado y justo en esa es donde no había ordenador porque se estaba arreglando".

El jefe de estudio, Pepe Alvarez, lamentó que esta situación vuelva a repetirse, "después de cinco años de tranquilidad, creíamos que no volvería a ocurrir, porque se consiguió con el esfuerzo de la Ampa hacer una casa para el conserje, se elevó la altura de las vallas y también se puso alarma, pero de nada ha servido, éste ha sido el más grave por las pérdidas económicas".

Recordó que hace una semana el colegio sufrió un acto vandálico en el patio, "donde atravesaron un pato vivo con un palo, desde la boca al ano, y lo quemaron en un rincón del patio".

En el centro sospechan que "o son antiguos alumnos o ya han robado aquí con anterioridad, porque conocían el colegio y la alarma, que no saltó. No creemos que nuestros alumnos hayan colaborado en esto".