Los comerciantes de San Roque piden a la CHG que agilice la obra del puente

Aunque los residentes se han ido poco a poco acostumbrando, después de dos meses, a los cambios que ha sufrido la circulación, a la gente que no es de San Roque le resulta aún difícil salir o entrar en el barrio, por lo que muchos evitan frecuentar sus calles y sus tiendas mientras se construye el puente. Y de esto es de lo que se quejan los comerciantes, especialmente los que tienen sus establecimientos en la avenida Ricardo Carapeto, que aseguran de manera generalizada que sus negocios se están resintiendo en mayor o menor medida por esta obra que creen que "va muy lenta y apenas se ven avances", por lo que piden a la CHG que la agilice.

El presidente de la asociación de empresarios de San Roque, Juan María Corrales, aseguró que "existen pérdidas generalizadas", por lo que la asociación está estudiando, según dijo, la posibilidad de exigir a las administraciones algún tipo de compensación por las pérdidas que la demora del puente pueda ocasionar a los empresarios. "Parece, según se ve, que se retrasará bastante". Aunque reconoció que puede resultar complicado "ya que las perdidos afecta a todos de manera muy desigual".

AFECTADOS Dependiendo del sector al que pertenezca el establecimiento o su situación en la avenida, las pérdidas económicas son más o menos importantes. En el caso de la tienda de regalos y juguetes que Bustamante tiene en Ricardo Carapeto, la obra "no ha quitado mucha clientela, porque la mayoría de los clientes son del barrio", según su propietaria Dolores Moreno, quien explicó que las personas que son de fuera no necesitan ir hasta San Roque porque Bustamante tiene siete establecimientos ubicados en distintos puntos de la ciudad. Algo similar ocurre a la zapatería Calzados Clan, cuyo responsable Domingo Gil calcula que las ventas sólo han descendido entre un 5% y un 7%, "porque la mayoría de mis clientes son del barrio".

Sin embargo, la repercusión no es igual en la tienda de ropa de niños Rigoletto, ya que según su encargada antes de iniciarse la obra "tenía muchas clientas de la Estación que han dejado de venir, dicen que les resulta muy complicado moverse por el barrio porque no conocen las calles". También Isidro Jiménez, el propietario de una tienda de pinturas en la avenida aseguró que le llega un 15% menos de clientes. "La gente se lo piensa antes de venir a San Roque. El 30% de mis clientes son de otros puntos de la ciudad y de algunos pueblos, y antes se acercaban a comprar cualquier cosa en un momento, ahora no".

MENOS COCHES Mucho más afectado manifestó sentirse Antolín Gómez, quien señalaba hacia la avenida Ricardo Carapeto diciendo: "estamos sordos, acostumbrados al barullo de tráfico que había en la avenida ahora pasa un 60% menos de vehículos. Este empresarios cifra las pérdidas en un 40%. La recaudación en Recambios Antolín no se ha visto afectadas por la venta de motos, "porque vendemos las tres marcas más prestigiosas", pero sí hay, según declaró, un descenso importante en la venta de recambios y bicicletas, "la gente no viene hasta aquí a por una bujía u otra pieza corriente". Además cree que las pérdidas se notarán más en la campaña de Navidad, que está próxima, en la que vende un importante número de bicicletas, "ahora los clientes se irán a las grandes superficies", señaló.

Su hijo Antolín Gómez manifestó sentirse "engañado" por la CHG, que se comprometió en una reunión "a tener el puente en tres meses, nos lo pintaron muy bonito". También Raúl Pintiado, propietario del bar La Esquina, se quejó del "ritmo tan lento que lleva la obra". En su caso, ha apreciado un descenso de clientes del 20% al 30%, "era gente que venía a nuestro restaurante procedentes del centro, Valdepasillas y Portugal".

Por su parte, la CHG recordó que el plazo de finalización del puente se cumple a finales de febrero "si no hay impedimentos", aunque las lluvias de estos días y el asentamiento de los pilotes está frenando su avance.