El concejal de Limpieza en el Ayuntamiento de Badajoz, Antonio Avila, no acaba de reincorporarse a su puesto cuando ya empieza a padecer los sinsabores del servicio. Ayer, Avila denunció el "incivismo" de muchos vecinos y la "falta de educación" de algunos que "no quieren a su ciudad", pues de otra manera no se entiende que continuamente la ensucien y estropeen el mobiliario urbano.

En concreto, el concejal se refería a lo ocurrido en la barriada de Cañada-Moreras. El lunes estuvo una brigada de Limpieza, formada por seis operarios, limpiando en profundidad la zona y ayer pudo comprobar, con gran disgusto, cómo justo al lado de un contenedor de basura alguien había tirado, ya de día, gran cantidad de desperdicios, junto a la parroquia. El concejal insiste en que es una cuestión de educación y cree necesaria una campaña de concienciación.

El titular de Limpieza, sin embargo, admite que a partir de ahora se va a encontrar con problemas para mantener el servicio, pues se van 70 contratados de la bolsa de empleo (de los 120 que normalmente están) y hasta abril no entran los siguientes.