La concejala de Urbanismo, Cristina Herrera, se mostraba ayer contrariada porque la Junta ha exigido que las casas prefabricadas que ha instalado en las Cuestas de Orinaza, para el realojo de las últimas familias de esta barriada marginal, tengan abastecimiento de agua. Según la concejala, para acceder a este servicio se necesita la licencia de ocupación y la Junta ni siquiera ha obtenido licencia de obras. Al consejero de Vivienda, Urbanismo y Transporte, Javier Corominas, lamentó que el ayuntamiento sea tan riguroso al pedir el cumplimiento de estos requisitos, "porque cuando estamos hablando de una necesidad social, el ayuntamiento debería dejarse de formulismos y de tantas delicadezas y dar el agua, porque los papeles son algo secundario". "Una vez más --insistió el consejero-- ésta es la colaboración del Ayuntamiento de Badajoz a un problema social".