La noche acompañaba y corría una ligera brisa, pero lo mejor que se respiraba en el ambiente era el aroma que desprendían los numerosos platos cocinados por los 18 restaurantes que la noche del viernes participaron en el I Festival Gastronómico Ciudad de Badajoz, que la Asociación de Cocineros de Badajoz organizó en Lusiberia. El menú estaba compuesto por 60 ofertas, entre primer plato, segundo y postre.

Junto a las piscinas iluminadas con velas se instalaron las mesas, vestidas como en el mejor de los comedores, mientras sonaba la música en directo. Sólo falló un restaurante, El Acebuche de Zafra. Procedían de Badajoz, Almendralejo, Fuente de Cantos, Mérida, Trujillanos, Montijo y Olivenza, así como una representación de Cáceres, con las suculencias de El Figón de Eustaquio. También estuvieron alumnos del instituto San Fernando de Badajoz y el de Vegas Bajas de Montijo, que fueron los encargados de elaborar el pan. Los menús se coordinaron para que los platos no se repitieran y en ellos predominaron los productos de la tierra.

El objetivo era que la gente de Badajoz conociese los buenos restaurantes de la provincia. El presidente de la asociación, Alonso Pantoja, reconoció el esfuerzo que tuvieron que hacer los participantes, porque tienen que abandonar sus negocios para acudir a Lusiberia.

Pantoja afirmó que "posiblemente" habrá un segundo festival el próximo año. Mucha gente se quedó fuera, porque sólo cabían 300 personas. Dentro no sobró ni una ración.