El nuevo crematorio puesto en marcha por la empresa Fureba, junto al nuevo cementerio, ha realizado desde su apertura el pasado mes siete incineraciones, cinco de ellas procedentes de familias de Badajoz y dos de otros pueblos de la provincia, según Antonio Correa, presidente de la sociedad que gestiona este servicio funerario.

El crematorio tuvo un pequeño problema tras ser inaugurado y fueron necesarios algunos pequeños reajustes en el horno, por lo que estuvo cuatro días sin ser utilizado. "Una vez ajustado por los técnicos, se puso en marcha y ha funcionado perfectamente", aseguró Correa.

Hasta la semana pasada, el crematorio realizó siete incineraciones "sin ningún problema; tal y como estaba previsto", y funcionó debidamente todo el proceso, que tiene dos fases, la de incineración propiamente dicha, y el de enfriamiento de las cenizas, dado que se ponen a 900 grados y hay que bajarla a temperatura ambiente, lo que conlleva unas dos horas en la primera y de hora y media a dos la segunda; unas cuatro en total.

De las cinco familias que acudieron a Fureba, en un caso hubo que llevar las cenizas a Madrid; en otros, quedaron enterradas en el columbario. Hubo uno que se enterró en un nicho y en otros, se los llevaron los familiares. En todos los casos se contrataron servicios completos.

Los familiares utilizaron la capilla para el último rezo y asistieron a la introducción del féretro con el cuerpo dentro en el horno. "Luego se marcharon y volvieron por la tarde, cuando había terminado el proceso, para llevarse las cenizas, en vez de esperar aquí las cuatro horas".

Según Correa, estos servicios no tienen un perfil concreto. "Lo demanda todo tipo de gente, hacen el entierro en la iglesia, o civil, como todos los sepelios, y luego vienen aquí y al cementerio. En su opinión, el número de incineraciones está bien, aunque más adelante esperan atender una media de ocho al mes o dos por semana, para subir luego poco a poco hasta 10 u 11.

Los precios oscilan entre 342 euros más la urna, que oscila entre 36 y 50 euros.