La Cruz Roja de Badajoz abrirá una guardería con tres aulas y 35 plazas para niños de cero a tres años en un local cedido por la Consejería de Fomento, situado entre las calles Prudencio Conde Rivallos y José María Gil Ontiveros, mediante un convenio que firmaron ayer el consejero José Luis Quintana y el presidente de la organización humanitaria, Javier Caro, en los servicios territoriales de Fomento en Badajoz.

El local cedido, del que ya adelantó información este diario en enero pasado, tiene 648 metros cuadrados de los que hay construidos 640, en la barriada de Pardaleras, explicó Quintana. Este destacó la importante labor que realizan instituciones como la Cruz Roja con colectivos de las personas más vulnerables, en materia de marginación, violencia de género, emergencias o dependencia.

También señaló la prioridad de la Junta y de la consejería que dirige para colaborar con entidades sociales, en cuyo marco se firmó el citado acuerdo de cesión, asumiendo Cruz Roja las obras, mantenimiento e impuestos del edificio.

El consejero aplaudió así el papel de la organización humanitaria, compuesta por personas que merecen todos los elogios, y muchas de las cuales son voluntarios que colaboran desinteresadamente, motivo por el cual merecen "todo el respeto de la sociedad", dijo.

Caro señaló que la guardería estará abierta para el próximo curso, para dar servicio a los vecinos de los barrios de la zona y que en el local se hará también un centro social y de formación, tanto del propio voluntariado como abierto a la ciudadanía, sobre todo en materia de atención a la dependencia, "para obtener recursos con los que sufragar servicios y programas que están en marcha" u otros nuevos.

Cruz Roja cuenta en Badajoz con 250 voluntarios, a los que quiere adaptarse en cuanto a especialización y horarios, de ahí la necesidad de un nuevo centro porque "la sede central de la calle Museo se nos ha quedado pequeña", afirmó Javier Caro.