Doscientos toxicómanos de Badajoz, sus pedanías y Portugal, reciben atención sanitaria y metadona por el programa de Reducción del Daño que mantiene Cruz Roja desde el 1995, con el objetivo de iniciar a la persona drogodependiente en un tratamiento para rebajar el consumo de drogas utilizando el citado sustituto de forma controlada.

Este número se refiere a la capital pacense, donde confluyen algunos procedentes de los poblados y de localidades portuguesas próximas, cada día entre las siete y las nueve de la tarde, pero la ciudad es una de las cinco rutas existentes y que sigue el itinerario por Mérida, Montijo y Talavera, por lo que entre todas la cifra supera los 300 toxicómanos, según el responsable de comunicación de la organización, Jesús López Santana.

Fue un programa pionero cuando se puso en marcha con la entonces Consejería de Sanidad y desde entonces se ha consolidado como efectivo para el fin perseguido, reducir la ingestión de droga y el daño del toxicómano, si bien la situación ha evolucionado al cambiar los hábitos de consumo.

"El drogodependiente de hoy no usa la vía parenteral, no se inyecta la droga. Es un paciente crónico con muchos años de consumo, con una edad media superior a los 30 años, que fuma una mezcla de heroína y cocaína y hace esta terapia de mantenimiento para reducir el daño", explicó López Santana. Entre ellos hay "pacientes que se derivan a procesos de deshabituación en un centro similar a un Cedex, en Olivenza, o de deshabituación a una granja en Plasencia. De este modo, "quien quiera tratarse de drogodependencia puede hacer el proceso completo con Cruz Roja".

El equipo del programa lo forman un médico, cinco enfermeros, dos psicólogos, cuatro trabajadores sociales, cinco conductores, personal administrativo y en Plasencia también cinco cuidadores".

Además, cada miércoles interviene en la ciudad un grupo de atención a 45 personas sin hogar y prostitutas que ejercen en la calle, que se encargan a visitar a un colectivo, del que una docena de ellas se dedica al negocio del sexo. Los voluntarios establecen contacto con esas personas para ver sus necesidades, actúan en prevención para la salud, les llevan la cena y comprueban si necesitan consulta médica, asesoría en asuntos judiciales o encontrar un albergue.

CENTROS DE DIA Por otro lado, Los centros de día que gestiona Cruz Roja reciben a diario a 60 personas. El que se encuentra en la sede central de la organización, en la calle Museo, está dedicado a enfermos de alzhéimer y otras demencias. En él atienden a 30 personas a las que prestan atención continuada con estimulación cognitiva, control de medicamentos, actividad física y otros cuidados destinados enlentecer el avance de la enfermedad.

El centro que se encuentra en el hogar de la tercera edad, en la calle Venegas, tiene otros 30 usuarios, personas mayores que reciben estimulación cognitiva en algunos casos, física en otros y disponen de programas de ocio.

Tanto unos como otros permanecen en los centros desde las ocho de la mañana hasta las cinco de la tarde, pues comen y merienda en ellos, para después trasladarlos a sus domicilios. El programa funciona desde hace15 años y cuenta con sendos equipos formados por un psicólogo, un enfermero y varios auxiliares de enfermería y de cuidadores.

El centro de Venegas se subvenciona con la aportación del IRPF y el de la calle Museo con una subvención de la Consejería de Sanidad y Dependencia.