Cuatro personas de la misma familia han sido detenidas por su participación en la multitudinaria reyerta ocurrida la noche del viernes en La Luneta, en la que cuatro agentes de la Policía Local de Badajoz resultaron heridos de diversa consideración al ser agredidos por los vecinos, que se lanzaron sobre los policías armados con piedras, palos y barras de hierro. Cerca de 300 personas hicieron frente a las fuerzas de seguridad.

Uno de los agentes se vio obligado a efectuar varios disparos al aire con su arma reglamentaria para disolver a la multitud que le tenía acorralados.

Este grave incidente tuvo lugar sobre las diez de la noche del viernes, como ya adelantó en su edición del domingo este diario, cuando un coche patrulla con dos agentes de la Policía Local hacían un seguimiento al conductor de un ciclomotor a la altura del colegio Santa Engracia, junto a Los Colorines, por una infracción de tráfico.

Cuando estaban identificándolo se acercó un hombre de 40 años, C. R. C., conocido por pertenecer a una familia con importantes historiales policiales, y empezó a increpar a los agentes, lanzándole a uno de ellos una piedra que le causó una herida en la cabeza.

Al instante, una veintena de vecinos de la zona empezaron a rodear a los agentes, por lo que el compañero del policía herido pidió refuerzos a la central. Al verse acorralado y temiendo por su integridad física, se vio obligado a utilizar el arma reglamentaria de modo incriminatorio, efectuando cinco disparos al aire, sin que ninguna persona resultara herida.

APOYOS

En esos momentos llegaron más agentes en otros dos coches de la Policía Local que buscando al autor de la agresión para detenerlo fueron hasta la calle La Lamprea, donde cerca de 300 personas, entre familiares y vecinos de la calle, provistos de piedras, palos y objetos punzantes, intentaban impedir la detención.

Ante la magnitud del altercado, se sumaron otras dos unidades de la Policía Nacional y una de la Guardia Civil, que llegaron de apoyo.

Los policías recibieron numerosos golpes, incluso intentaron pinchar a uno de ellos con unas tijeras. Otro recibió un fuerte golpe con una barra, lo que llevó de nuevo a realizar disparos al aire.

Finalmente lograron detener a C. R. C. y dos días después el Cuerpo Nacional de Policía detuvo a tres familiares (hermanos del primero) por su presunta implicación en los hechos.

En el altercado, resultaron dañados tres vehículos policiales. Un coche de la Policía Nacional sufrió un accidente cuando se dirigía a La Luneta, a la entrada de la avenida Padre Tacoronte, por lo que no pudo llegar hasta el lugar del incidente.

HECHO GRAVE El concejal de Policía Local, Germán López Iglesias, calificó ayer este hecho de "grave, aunque puntual" y mostró su extrañeza ante este comportamiento de esos vecinos con los agentes locales, cuando además no se había producido ningún incidente anterior con la Policía Local. "No entiendo porqué un barrio entero defiende a una persona que es un delincuente que además ha agredido a un policía".

López Iglesias destacó que la policía de la ciudad "es una policía cercana al ciudadano, no es represora ni intimidatoria".

Según dijo, la persona que conducía el ciclomotor "no tiene aparentemente nada que ver con el altercado".

También elogió la profesionalidad de los agentes "que en lugar de disparar al aire podrían haber tirado a otro sitio. Gracias a su profesionalidad no estamos hablando de un hecho más grave", añadió.