Después de más de dos años de trabajos, la rehabilitación integral de las casas mudéjares, ubicadas en la plaza de San José, ha llegado a su fin. El alcalde Miguel Celdrán inauguró ayer esta actuación municipal en la que el ayuntamiento ha invertido 473.341 euros. Este inmueble, que está pendiente de que retiren los cables de la fachada y de que se termine de pintar una parte de la medianera, será la sede de la Concejalía de Turismo y del centro de interpretación turística de la ciudad, una vez que se dote del mobiliario y los recursos necesarios.

Angel Gamero, autor de este proyecto, acompañó ayer a Celdrán junto con los arquitectos municipales Begoña Galeano y Ramón Crespo, a la vista del inmueble. La restauración se ha realizado de manera artesanal y con ella se ha logrado mantener todos los elementos mudéjares posibles que tenía desde su primitiva construcción, ya que las casas son del siglo XV, aunque en ellas han aparecido restos de los siglos XII y XIII, lo que las hacen las construcciones urbanísticas más antiguas de la ciudad.

Las viviendas se han situado al nivel que tenían en sus orígenes, 40 centímetros por debajo de la rasante de la calle, para lo que se han acondicionado unas escalinatas de acceso a la calle principal y la primitiva puerta de acceso, con forma de arco ojival.

El ayuntamiento ha adquirido dos viviendas ubicadas en la parte trasera de las casas, que da a la calle Encarnación, que serán derribadas para continuar las excavaciones en el patio, donde se conservará un aljibe mudéjar. Según Celdrán, es posible que aparezcan restos de interés que podrían quedar a la vista de visitantes en el patio.

En la restauración se ha conservado la estructura principal de las casas y se han sustituido todos los forjados utilizando el mismo método constructivo. Los huecos originarios de las casas se han recuperado y los que no lo eran se han cegado. Cuando acaben las excavaciones en el patio "se hará un jardín arqueológico visitable".