La Asociación Amigos de Badajoz denunció ayer que las rejas de la nave central de la catedral, que datan del siglo XVII, "han sido arrancadas y amontonadas sin el permiso de la Dirección General de Patrimonio de la Junta de Extremadura". El presidente de esta asociación, Antonio Manzano, considera esta acción "un atropello contra el patrimonio de la ciudad", así como la colocación de seis enormes pantallas fijas de televisión en las naves laterales de la catedral, "que causan un enorme impacto ambiental", para cuya colocación "ha sido necesario perforar las columnas góticas del siglo XVI".

Por ello, Amigos de Badajoz pedirá a la Dirección General de Patrimonio y al ayuntamiento "que tomen medidas urgentes ante estos atropellos".

Por su parte, el cabildo catedralicio respondió, a través de un comunicado, que las rejas han sido desmontadas, como en otras ocasiones, por las obras en el retablo mayor y que "volverán a su lugar tras la restauración".

Respecto a las pantallas, explicó que se debe a la falta de visibilidad de las ceremonias, una opción que se han adoptado en templos como la catedral de Santiago de Compostela y el monasterio de Guadalupe.